Muchas veces vamos por la calle o al súper o simplemente a un lugar donde queremos lucir perfectas pero sumamente naturales. Ese es el efecto que un maquillaje de transparencia nos da.
El objetivo es tener una piel perfecta, como si fuéramos una muñeca de porcelana e irradiar belleza, juventud y frescura.
Lo mejor es utilizar una crema hidratante, que nos aporta vida. Muy bien difuminada y sin excesos, pero que se vea frescura y una base de maquillaje líquida o en crema de preferencia oil free para no ser una gota de agua andando.
Si tenemos alguna imperfección que corregir, como un granito, ojeras o alguna rojez, es muy importante utilizar el corrector por debajo de la base y en todos neutros. En esta ocasión no queremos tener muchos contrastes.
Las sombras las utilizamos en colores neutros y con terminado mate como puede ser el coca, un vainilla, un rosa palo o un dorado para dar luz. Se utilizan máximo dos tonos y se difuminan muy bien.
Para el rubor podemos utilizar uno que se parezca a tu tono de chapita natural (es como cuando terminas de hacer ejercicio o te sonrojas) y puede ser tanto crema como en polvo para mitificar y sellar un poco la base.
Si se puede, podemos prescindir del delineador o si decides utilizar uno, que sea en un todo claro y en lápiz o con la misma sombra en polvo. Lo mismo con el delineado de cejas. Procura que sea con una sombra color capuchino o gris y solamente es los espacios que necesites rellenar.
Para los labios un labial color natural o un gloss con color puede ser muy buena opción y para terminar utiliza sólo una capa de rímel y retoca sólo en los extremos de arriba para enfatizar más la mirada.
El resultado perfecto es como sí pareciera que acabamos de salir de la regadera y que toda nuestra belleza es muy natural.
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Gracias Isa, excelentes recomendaciones para vernos naturales.
Recuerda, soy Alejandra Coghlan y estás en mi casa que es tu casa.
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